Los seres humanos somos la única especie que puede formar un puño, bien sea para golpear algo, como medida de manejo de emociones para afrontar alguna situación difícil o incluso como saludo (el ya popular choque de puñitos). Pero, así como la quiromancia estudia las líneas y formas de la mano, existen algunas corrientes de estudio del lenguaje corporal y la personalidad que afirman que la forma del puño dice mucho de alguien. Si tienes curiosidad sobre qué podrías descubrir sobre ti, simplemente forma un puño con tu mano sin pensarlo mucho y compáralo con los siguientes tres tipos.
1. Tipo A: puño de corazón abierto
Si cuando haces un puño tu pulgar queda de lado, apoyado contra el lateral del dedo índice, se supone que eres una persona amable y generosa. También muestras estabilidad y fortaleza, lo que te haría ideal para puestos de liderazgo, porque trabajas duro para alcanzar tus metas y para ayudar a quienes te rodean a alcanzar las suyas. Por esto, los demás tienden a buscarte cuando necesitan un consejo, lo cual te encanta porque conversar es una de tus actividades favoritas.
Si hubiera que describirte, este estudio de personalidad diría que eres una persona enérgica, curiosa, compasiva, centrada, sociable e inteligente. Sin embargo, estas características hacen que seas blanco de gente que busca aprovecharse de ti para su propio beneficio. Debes prestar más atención a las señales y aplicar la autodefensa cuando sea necesario.
2. Tipo B: puño de la persona creativa
Es el tipo más común: tu pulgar queda al frente de tus dedos índice, medio y anular, y en algunas personas incluso alcanza el meñique. Quienes confían en estos estudios afirman que se trata de personas creativas, seguras, agradables, atractivas, con habilidades de comunicación efectivas, inteligentes, únicas y directas. En general, se dice que quienes tienen este puño son creativos, con una personalidad que atrae a los demás y con una autoestima alta, pero sin ser arrogantes.
También se destaca que tienden a caer en el perfeccionismo, lo que a menudo les genera mucho estrés y ansiedad por el temor a fracasar en cualquier cosa que se propongan. Si este es tu tipo de puño, disfrutas de estar al aire libre y detestas permanecer en un mismo lugar por mucho tiempo; la rutina es tu enemiga. Tu honestidad es una de tus más grandes virtudes, pero a veces también te mete en problemas cuando no sabes controlarla.
3. Tipo C: el puño encantador
Si tu pulgar queda dentro de tu puño, rodeado por los otros dedos, entonces tienes el tipo de puño menos común. Aunque eres una persona introvertida, prefieres la soledad y valoras muchísimo tu privacidad, en realidad posees excelentes habilidades de comunicación y puedes encantar a cualquiera y mostrar tu lado divertido si te lo propones.
Para conectar con alguien más, esa persona debe compartir tus mismos valores y ser honesta, porque te disgustan la falsedad y el drama. De hecho, se dice que quienes tienen este tipo de puño son bastante empáticos y los problemas de los otros pueden afectarles, y es por eso que prefieren mantener la distancia a menos que se trate de gente cercana.
Tu capacidad de observación y organización te otorgan la habilidad de encargarte de cosas, por lo demás, como, por ejemplo, de preparar todo para una reunión familiar.
